Me venero, contemplo e impulso. Me apoyo, admiro y mimo.
Me considero un templo y cómo tal me adoro , aprecio, me lleno de plegarias de amor y de besos.
Soy un instante, soy el momento que me permitís darte.
Soy lo que concreto, todo lo que manifiesto.
Soy el ahora.
Puedo ser efímera como
perpetua.
Soy completamente fiel a mi misma, me permito ser y conmigo mi entorno.
Porque todo parte de mi.
Si soy mi límite, me desafío. Vibrando cada día más, en otra sintonía, entendiendo, observo, aprendo, crezco.
Nueva faceta, más renovada. Hace añares que no me sentía así, pero aún así con todo lo que carezco, me siento agradecida, bendecida y abundante.
Cálidamente feliz.
Comentarios
Publicar un comentario